Bueno, precisamente a puertas de un nuevo intento por sanar muchas de las heridas de mi propia vida, encuentro un escrito de Henri Nouwen que me sorprende porque al momento de leerlo era como si mi corazón de repente hubiese encontrado una fuerte identificación, una enorme verdad.
Y puedo decir que eso es bueno, que trae reposo para mí.
Lo comparto sin más preámbulos porque siento que tendré que leerlo una y otra vez hasta comprenderlo mejor... me siento feliz por dentro de encontrar tesoros tan maravillosos en los descubrimientos de los siervos de Dios, de diferentes denominaciones, creencias y vivencias, no paro de leer, es como si hubiese estado con hambre por mucho tiempo y luego saciada y provocada por más....
Listo, ya no más... ahí va:
"Te han herido de muchas maneras. Cuando más te abras a ser curado, más descubrirás la profundidad de tus heridas... El gran reto es aprender a vivir con la ayuda de tus heridas en lugar de limitarte a pensar en ellas. Es mejor llorar que preocuparte, sentir tus heridas profundamente que comprenderlas, dejar que formen parte de tu silencio, que hablar de ellas. La elección a la que te enfrentas constantemente es hacer que tus heridas formen parte de tu mente o de tu corazón. En tu mente puedes analizarlas, encontrar sus causas y sus consecuencias, y acuñar palabras para hablar y escribir sobre ellas. Pero seguro que ésa no es la fuente de tu curación. Tienes que dejar que tus heridas lleguen hasta tu corazón. Ahí puedes superarlas y descubrir que no tienen capacidad para destruirte. Tu corazón es más grande que tus heridas."
Henri Nouwen, Libro: La voz interior del amor.
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